Conversamos con Braulio Bauab, Corredor Inmobiliario y Contador Público, sobre la actualidad del sector inmobiliario y las oportunidades que crea el contexto.
“Lo que más me apasiona de mi profesión es la relación con las personas, escuchar y entender qué desean de los espacios que van a habitar y cómo ayudarlos a atravesar el proceso de la mejor forma, agregando valor para que todo suceda en un clima de tranquilidad, confianza, y placer”, comienza Braulio Bauab, Contador Público por la Universidad de Buenos Aires, Martillero Público y propietario de Braulio Inmuebles, que hace hincapié en lo humano a cada paso de la entrevista. “Lo humano ante todo. Esa persona que quizás podemos ayudar a que compre o venda su casa y confía en nosotros, viene mucho antes que el dinero. Si podemos aportar en lo humano, eso es lo que queda y lo que genera un vínculo a largo plazo”, reflexiona. Y lo hace tanto de cara a sus clientes, como puertas adentro, con su equipo, compuestos por 3 treintañeros, dos “cincuentones” (como él los define) y “la chiquita del equipo, Vicky, nuestra community manager, de esa generación Y que nos deslumbra con su frescura y espontaneidad”. “Somos seis. Estoy muy satisfecho y me hace feliz el equipo que armamos. Tengo la convicción de que lograr planos de horizontalidad en los equipos es lo mejor, lo que construye el largo plazo. No a las verticalidades, a las jerarquías. Intento que cada uno despliegue al máximo su singularidad, ese ser único e irrepetible que somos todos”, comenta sobre el equipo que lo acompaña.
El equipo de Braulio Inmuebles.
El 2020 probablemente sea uno de los años que más cambios ha gatillado a nivel mundial. Muchos de esos cambios tienen que ver con una nueva forma de pensar los hogares, las oficinas y hasta las ciudades, que Bauab no ve con ojos del todo buenos. “No me gustan las generalizaciones, menos en en la búsqueda de una vivienda o de un espacio para trabajar, pero en pos de englobar, creo que mucha gente entró en una búsqueda casi frenética, hasta diría impulsiva de espacios con verde, alejados de los centros urbanos”, destaca Bauab. “Como muchas decisiones intempestivas, sin otorgarle el tiempo de análisis necesario, puede ser una decisión apresurada. Si la nueva normalidad va permitiendo que las ciudades funcionen nuevamente como lugares donde tenemos una inmensa oferta cultural, gastronómica, educacional, de barcitos, etcétera, va a haber un regreso paulatino a revalorizar lo citadino”, resalta.
Además de revolucionario, este viene siendo también un año por demás desafiante. En ese sentido, las economías en general y la argentina en particular, han acusado un fuerte golpe y el mercado inmobiliario no está exento de estos vaivenes. “Lamentablemente la clase media, que tiene una o dos propiedades como máximo, sufre mucho las consecuencias de la economía. Los inmuebles que apuntan a este segmento son los que más han bajado de valor”, destaca Braulio. “En este contexto, se encuentran muy buenas oportunidades para comprar, reciclar y vender. El costo de una remodelación es mucho menor en dólares, pero la suba del precio del inmueble por las mejoras sigue siendo mayor en dólares. Estamos trabajando mucho con operaciones de compraventa simultáneas, en las que quien vende sacrifica un poco el valor de su inmueble, pero se capitaliza en la reducción del valor del nuevo y remodela a valores menores en dólares”, destaca, a la vez que recomienda “a quienes buscan vender, les sugiero presentar bien el inmueble: el costo de una mano de pintura, reparar baños y cocinas serán menores que lo que capitalizarán en dólares. Y a quienes buscan comprar, no teman hacer ofertas agresivas, y no teman comprar inmuebles para remodelar”.
“A quienes buscan vender, les sugiero presentar bien el inmueble: el costo de una mano de pintura, reparar baños y cocinas serán menores que lo que capitalizarán en dólares. Y a quienes buscan comprar, no teman hacer ofertas agresivas, y no teman comprar inmuebles para remodelar”
Y si de transformaciones hablamos, también el sector inmobiliario atravesó las suyas, siendo la aplicación de nuevas tecnologías y la implementación de procesos digitales, las principales. “El aislamiento obligatorio nos ayudó a intensificar la muestra de inmuebles a través de videos y recorridos en tres dimensiones. Fuimos la primer inmobiliaria en firmar un boleto de compraventa a través de una certificación remota con la escribana, un desafío profesional magnífico, que abre y facilita la posibilidad de efectuar operaciones con compradores y vendedores del exterior. Sin dudas, la digitalización de los procesos es una de las partes más positivas. El perfeccionamiento en la presentación de los inmuebles a través de medios digitales”, resalta. “De todas formas el contacto humano sigue siendo necesario: somos latinos, nada mejor que un apretón de manos, o un abrazo, cuando algún comprador logró acceder a la vivienda de sus sueños”.
Sobre el cierre quisimos conocer qué importancia tiene la comunicación en el día a día de la actividad y cuál es el aporte que hacen los canales digitales. “La comunicación juega un rol clave”, comienza. “Las plataformas como zonaprop o argenprop, no alcanzan. Hay que llegar a nuestros prospectos desde lugares creativos”, refleja. “En este aspecto, para nosotros las redes tienen un rol fundamental. Somos muy fuertes en Instagram, Facebook, Linkedin, donde contamos con unos 27.000 seguidores, entre todas estas redes. También WhatsApp y campañas de email marketing, con una base de contactos segmentada, son muy importantes”, cuenta Bauab, quien recientemente dio una charla para el colegio de Martilleros de la Ciudad de Córdoba, sobre la importancia de las redes sociales en el mercado inmobiliario. “Las redes sociales son redes de vínculo. Nuestros clientes piden saber quiénes somos para confiarnos, nada más y nada menos, que su inmueble, que muchas veces es el ahorro de toda su vida. Tenemos todo el espacio virtual del mundo para darnos a conocer y generar confianza, elemento clave para elegir una inmobiliaria”, cierra.
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